Inma nos ha remitido unas lineas para compartir con vosotros :
Intentaré ser muy breve… David y yo nos conocimos una tarde – noche de domingo en bacanal rojales, nos caímos en gracia pero no fue hasta unos días después cuando quedamos para tomar una cerveza en el luz mar (playa de los locos) dónde ambos habíamos veraneando toda la vida, en esa primera cita creo q los 2 nos enamoramos locamente, descubrimos muchas cosas en común, la más importante nuestra pasión por el mar el por aquel entonces vivía en Valencia, pertenecía a un grupo especial de la guardia civil y estaba destinado allí, yo estaba terminando la universidad en Murcia, el primer año fue a distancia, o subía yo a Valencia o el bajaba, cada vez nos apetecía hacer más cosas juntos, así que 9 meses después yo ponía rumbo a Valencia, David ya tenía a kila(la perrita) y ambos adoptamos a lobo (aunque lobo siempre fue mío 🤪), los 4 juntos formamos la familia lobos de mar, nuestra primera casa fue en el saler Valencia, donde comenzamos una vida en pareja, haciendo de nuestros paseos al atardecer en la albufera y patinando por la noche en Valencia una rutina de vida, fueron nuestros deportes de agua, los que nos llevaron a poner rumbo a Tenerife en verano de 2014 y allí pasamos los 2 mejores años de nuestra vida, surfeamos con delfines salvajes, nadamos con tortugas, culminamos el teide y un sinfín de aventuras pq así somos nosotros, David un aventurero q siempre está tramando algún plan y yo una loca que se deja llevar y los perros unos todo terrenos, que han montado en avión, cruzado el atlántico en barco con la casa a cuestas y mucho más,… Un día decidimos volver pq la familia y amigos tiran mucho y pq el trabajo escaseaba en la isla para mi,
Nunca habíamos hablado de casarnos, no me hacía especial ilusión y a David tp, o eso creía pq en mi cumpleaños de hace 1 año, me recogió diciendo q tenía una sorpresa, conociéndome, pensé alguna actividad Chula pero pudo rumbo a Totana y allí había una avioneta esperándonos para hacer un salto en paracaídas, fue la mejor sorpresa de mi vida pero lo q no me esperaba era el resto, nada más aterrizar vino hacia mi, yo gritaba eufórica del subidón y hincó la rodilla en el suelo y me lo pidió